Convocatoria dirigida a la comunidad artística de la ciudad de Valdivia: Proyecto de creación de gloria Godínez "Seducir la necesidad"

Fondo Nacional para la Cultura y las Artes Programa de Intercambio de Residencias Artísticas México/Chile 2008

Invitación dirigida a la comunidad artística de la ciudad de Valdivia (performers, bailarines de danza contemporánea, actores, músicos, videoastas, fotógrafos, escritores y cualquier creador interesado en el arte como técnica) para participar en un encuentro de creación que cuestiona la o las necesidades de una disciplina y busca los modos de seducirla. Presentación del proyecto y entrevistas a partir del 25 de enero del 2008

Seducir la necesidad
Lo necesario desaparecerá como lo necesario. Lo posible se habitará como posible.
La diferencia entre seducción y poder es el dominio. El dominio de la seducción es lo posible, lo que apenas existe; el dominio del poder es lo necesario. Necesidad y posibilidad casi se oponen. Se presume desde siempre que el hombre ha padecido a la necesidad. Seducir la necesidad sería en todo caso una gran contradicción. Simular que lo necesario apenas existe, que es pura posibilidad. Seducir la necesidad es la más grande de las proezas amorosas: soltar y no vencer. Seducir la necesidad es la más grande de las proezas políticas: no precisar poder.
Gloria Godínez

Seducir la necesidad
PROYECTO DE INVESTIGACIÓN COREOGRÁFICA
Valdivia, Chile, 2008.

Todo ocurre como si fuéramos de necesidad en necesidad, de dificultad en dificultad transitando en la vida y reflejando esta lucha en ella, en eso que hacemos con nuestros días. También en el arte en general, todo ocurre como si pasáramos de necesidad en necesidad. Hablo de técnica, de lo que aprendimos como eso que debe ser, lo que está bien hecho, bien pintado, o bien fotografiado, de lo que está bien bailado, casi como ley: lo que es válido y necesario. El problema de esta noción de arte (que también es noción de vida), el problema de la técnica entendida como ley, es que todo puede ocurrir peor, como si fuéramos de imposibilidad en imposibilidad… Para no pelear ni dominar a la técnica, para no vencer a nuestro deseo de crear, mejor es seducirnos a nosotros mismos. ¿Y si el deseo es posible? ¿Si lo necesario se vuelve hospitalario, amable? ¿Y si somos capaces de seducirlo, en la vida, como en la danza, en el cuerpo?

Bailar es olvidarse de que tienes cuerpo.
Estar en el aire de cualquier movimiento.
Y la emoción de una caída brusca en la conciencia de lo mágico.

José Bergamín

Seducir la necesidad en danza parte de una investigación que ya he iniciado: se trata de aplicar una sola consigna mientras se baila, a saber, la de seducirnos a nosotros mismos; se trata de realizar trayectos que de antemano, se sabe, son de paso y se van a olvidar. Esta consigna pretende liberar a la danza del proceso personal de la memoria y del ideal del movimiento. En este proyecto de investigación coreográfica lo más importante es el proceso de construcción, es el viaje con su serie de desplazamientos interiores y exteriores, entre los cuales habría que crear huecos y espacios vacíos, para que de repente se dispare la imagen, el deseo. La búsqueda es para desarticular mi necesidad y exponerla así, desarticulada. Remover el dominio sobre el cuerpo para dar lugar a la fragilidad, a la pasividad y a la seducción. Seducir a la necesidad en colaboración es un trabajo de investigación escénica, sobre la técnica. “Técnica” entendida como arte, a la vez que forma de producción y recreación de realidades. No se trata de abandonar a la técnica porque abandonaríamos al arte, se trata más bien de reapropiarnos de ella. Este proyecto será trabajado en colaboración con ejecutantes y creadores de Valdivia, no sólo de danza contemporánea, sino de otras disciplinas, en específico, con músicos, fotógrafos, pintores o videoastas de la región que también integren a la creación de arte contemporáneo los rasgos particulares de esta ciudad -como primera impresión y desde lejos, pienso en el agua-. mas info